Puede parecer curioso, pero la demanda de servicios de escorts de Barcelona, pasado el día del padre, aumenta siempre de manera considerable.

¿El motivo? Pues no deja ser otro que la insatisfacción que produce un día donde la mayoría de los hombres siguen pensando que el mejor regalo se lo van a encontrar en la cama, con su pareja, y disfrutar de una noche un tanto especial. Pero no, no es así, el día del Padre es para que los hijos les hagan entrega de algún regalo hecho por sus hijos en el colegio, o si son más mayores el clásico bote de colonia o la tradicional corbata.

En realidad ellos no necesitan regalos materiales para ser felices, aunque si es cierto que lo agradecen, pero en la mayoría de las ocasiones lo aceptan porque parece que la fecha lo exige de alguna manera. Sino más afecto, sentirse más deseado, más querido, sentir que su pareja realmente es su amante.

Por este motivo, el lunes siguiente a la fecha, o este viernes ya que esta año se celebra en jueves, las escorts de lujo, son las encargadas de satisfacer sus deseos más íntimos que de alguna manera quedaron frustrados en una fecha donde se las prometían ser más sexuales que cualquier otro día del año.

Sin embargo, esto no ocurre ni el día de los enamorados ni tampoco el día de la madre, ya que son ellas las que deseosas de pasar una noche especial, si están más predispuestas a ser agasajadas con el cariño y el sexo de su pareja. Pero el día del Padre, parece estar condenado a ser un día de abstinencia, o incluso un día más.

Todos los años, esta especie de desplante, se traduce en una mayor demanda de acompañantes de lujo. No se reclaman por una especie de venganza hacia la pareja, sino por cumplir aquellos deseos sexuales que deseaban poner en práctica esa fecha. Fantasías que caen en saco roto, y que tan solo una preciosa escort puede hacer realidad, además de con cariño y pasión, algo que ansiaron en esa fecha tan especial para algunos.