El culo no deja de ser uno de las zonas de las escorts donde más se fijan los hombres. Y como, no, las mujeres también se les van los ojos detrás de aquellos culos masculinos redonditos y algo prominentes . Nada peor en ambos casos que unas nalgas caídas o demasiado grandes o pequeñas.
Ese oscuro objeto de deseo, siempre es objeto de acariciar en los prolegómenos de una relación con una escort. A ellos les encanta cogerlos con fuerza, apretarlo contra su cuerpo y sentir su dureza, a la vez que la suavidad de su piel.
En realidad, es un oscuro objeto de deseo no corresponde precisamente con las zonas más erógenas del cuerpo, pero siempre existe una atracción poderosa sobre él.
No hay que olvidar que nuestros antepasados, aquellos hombres primitivos, solían mantener relaciones sexuales de pie, y siempre penetrando a la mujer desde atrás, por lo que el culo era casi más atractivo para ellos que la cara, el pecho u otras zonas de su cuerpo.
Hoy en día, mantenemos ese deseo por tocar el culo de nuestra amante, y si se trata de una bella escort de Madrid, no será extraño que ellos manifiesten un deseo irrefrenable, dar palmaditas o azotes a las acompañantes de lujo.
¿Azotes cariñosos para escorts o spanking?
Muchas veces, cuando en la ficha de una escort encontramos la palabra spanking, nos está dando a entender que no le importa recibir azotes en el culo. Pero sin entrar en la sumisión ni en prácticas BDSM. Es decir, no desea que su cliente le ponga el culo ardiendo a base de latigazos, sino que por el contrario le gusta recibir cachetadas en las nalgas. A muchas de ellas les encanta, es algo más común de lo que pensamos, y no sólo a las chicas escorts, sino a una gran mayoría de mujeres.
Este juego, nos viene a recordar a los azotes en el culo que se recibían antes por el mal comportamiento cuando se era niña o adolescente. Con los azotes, la escort cobra un cierto grado de sumisión que acelera su propia excitación, mientras que para la inmensa mayoría de hombres, les recuerda también la figura paterna, que de una u otra manera intentan emular.
Muchas de las prácticas que podemos considerar novedosas, no lo son. Y como siempre recordamos, algunas de ellas, las llevamos en los genes.
Carla Mila