La revolución de las costumbres sexuales que aún sigue ocasionado la obra “Cincuentas sombras de Grey”, ha acercado a muchas parejas a asomarse al mundo del bondage, pero también a muchos clientes de escorts ha realizar alguna practica, como por ejemplo dejarse atar a la cama para gozar de los besos, caricias y posturas de una bella acompañante de lujo.
Todas estas novedosas relaciones, no son más que fantasías que tanto hombres como mujeres desean poner en práctica para mantener con vida la llama del deseo sexual. Siempre que los dos estén de acuerdo, puede suponer un mundo de experiencias divertidas y a la vez placenteras.
Dejarse amarrar, vendar, o controlar de alguna manera el cuerpo de la pareja, debe ser primero bien consensuado, de lo contrario la experiencia puede tener un final desastroso.
Hay personas que no soportan que se les priven de sus movimientos, y para ellos siempre deberá haber una vía de escape o nunca dejar que la pareja no acepte esa fobia.
Corbatas, pañuelos de seda, esposas de mentira, cinturones o incluso prendas íntimas, pueden ser muy recurrentes a la hora de sus primeros juegos.
Ya una vez atado uno de los miembros de la pareja, el otro podrá realizar una excelente sesión de besos, caricias, sexo oral, hasta llegar a la penetración.
También vendar los ojos, y comenzar ha jugar con el cuerpo de tu pareja, brindará un sinfín de sensaciones que son muy sensuales y excitantes.